Cultivo de la Rosa
Enfermedades
-Mildiu velloso o tizón (Peronospora sparsa)
Provoca la enfermedad más peligrosa del rosal ya que
ocasiona una rápida defoliación, sino se actúa a tiempo puede resultar muy
difícil recuperar la planta
Se desarrolla favorablemente bajo condiciones de elevada
humedad y temperatura, dando lugar a la aparición de manchas irregulares de
color marrón o púrpura sobre el haz de las hojas, pecíolos y tallos, en las
zonas de crecimiento activo. En el envés de las hojas pueden verse los cuerpos
fructíferos del hongo, apareciendo pequeñas áreas grisáceas.
Control
-Para prevenirlo debe mantenerse una adecuada ventilación en
el invernadero. Además debe evitarse películas de agua sobre la planta ya que
ésta favorece la germinación de las conidias.
-Se debe aplicar tratamientos preventivos con metalaxil +
mancozeb y curativos con oxaditil + folpet -Oídio (Sphaerotheca pannosa)
Los síntomas, manchas blancas y pulverulentas, se
manifiestan sobre tejidos tiernos como: brotes, hojas, botón floral y base de
las espinas. Las hojas también se deforman apareciendo retorcidas o curvadas.
Control
-Es muy importante su control preventivo ya que los ataques
severos son muy costosos de eliminar. Se recomienda utilizar sublimadores de
azufre.
-Debe controlarse la temperatura y la humedad en el
invernadero, evitar la suculencia de los tejidos y reducir la cantidad de
inóculo mediante la eliminación de los tejidos infectados.
-Para tratamientos curativos, se puede emplear propiconazol,
bupirinato y diclofluanida.
-Roya (Phragmidium disciflorum)
Se caracteriza por la aparición de pústulas de color naranja
en el envés de las hojas.
Suele aparecer en zonas donde se localiza la humedad.
Una fertilización nitrogenada excesiva favorece la aparición
de la roya. Por el contrario, la sequía estival y la fertilización potásica
frena su desarrollo.
Control
-Es conveniente controlar las condiciones ambientales así
como realizar pulverizaciones con triforina, benadonil, captan, zineb, etc.
-Moho gris o botrytis (Botrytis cinerea)
Su desarrollo se ve favorecido por las bajas temperaturas y
elevada humedad relativa, dando lugar a la aparición de un crecimiento fúngico
gris sobre cualquier zona de crecimiento, flores, etc. Asimismo hay que cuidar
las posibles heridas originadas en las operaciones de poda, ya que son
fácilmente conquistadas por el patógeno.
Control
-Para el control de la enfermedad resultan de gran
importancia las prácticas preventivas, manteniendo la limpieza del invernadero,
ventilación, con la eliminación de plantas o partes enfermas y realizando
tratamientos con fungicidas a base de iprodiona y procimidona.
-Agallas o tumores (Agrobacterium tumefaciens)
Las agallas o tumores producidos por Agrobacterium
tumefaciens se forman en el tallo hasta una altura de 50 cm sobre el suelo o en
las raíces, penetrando por las heridas cuando la planta se desarrolla sobre
suelo infectado.
Control
-El suelo debe esterilizarse, preferentemente con vapor,
antes de la siembra.
-Las plantas con síntomas se deben desechar.
-El control biológico de la agalla es posible
con Agrobacterium radiobacter, cepa K84
No hay comentarios:
Publicar un comentario