HUERTAS Y JARDINES SIN PLAGUICIDAS
¿Cómo combatir plagas naturalmente?
Virus
Aparecen manchas circulares o rayas amarillas en el follaje. Las plantas se deforman y atrofian, dejan de crecer e incluso pueden morir. No hay cura para esta enfermedad, por lo que es recomendable eliminar las plantas afectadas o quemarlas en forma inmediata. Algunas variedades de pepinos y los zapallitos son resistentes a estas enfermedades.
Canoro de la manzana y de la pera
Puede afectar a los árboles frutales, pero es posible eliminarlo a través de la poda.
Podredumbre de los brotes
Aparecen fragmentos negros y hundidos en los extremos de los brotes de tomates o pimientos, aunque el resto de la planta permanece sana. La causa es la carencia de calcio en los frutos y el riego inadecuado o irregular.
Hernia de la col
Esta enfermedad afecta a la familia de las crucíferas. Sus raíces se hinchan y deforman, y las plantas dejan de crecer. Se puede tratar la tierra con cal y mejorar el drenaje. Destruir las plantas infectadas.
Sarna de la papa
Aparecen costras sobre la piel de las papas, pero el resto del tubérculo no es afectado y se puede comer. Evitar tratar la tierra con cal. Es conveniente incorporar gran cantidad de materia orgánica antes de iniciar la plantación.
Regar periódicamente.
PREPARADOS CASEROS
Purín de ortigas: Fortalece las plantas y actúa como insecticida (pulgones, etc.). Se prepara un purín fermentando con 1 kg de planta fresca remojada durante varios días en 10 litros de agua o 200 gr. de planta seca en 10 litros de agua. Diluido 20 veces, estimula el crecimineto de las plantas. Sin diluir, actúa como insecticida.
Infusión de ajo: Se prepara dejando remojar dientes de ajo durante 24 horas. Luego de la preparación se cocina durante 20 minutos a fuego lento, se deja enfriar y se aplica. Se utiliza para ahuyentar pulgones. Para combatir hormigas, se aconseja regar durante varios días con esta solución de agua tibia los lugares frecuentados por las
hormigas.
Para controlar gusanos, orugas cortadoras y mosca blanca se pican 90 gramos de ajo más dos cucharadas de aceite mineral y se deja reposar durante 24 horas. Luego se agrega medio litro de agua más ralladura de jabón blanco (en bruto), mezclar bien y aplicar.
